Campeonato de Álava de natación Máster. 2016

Con los años que llevo compitiendo, uno ya se va dando cuenta de lo que cuesta ganar cualquier cosa. Así que creo que hay que saber valorar lo que cuesta ganar. Lo que sea. Alguno supongo que dirá que la competencia era mínima, que vaya mierda de tiempo, etc… No he metido una burrada de metros. Más bien, los mismos de otros años, pero los he cuidado más, he hecho grabaciones con Jamie Turner, Ciro Tobar, Álvaro Palacios 😉 He visto mis vídeos tropecientas veces, me he pasado tardes enteras viendo los vídeos de los mundiales una y otra vez… Así que creo que aunque ando más que justo de tiempo, es de justicia dedicar unas líneas a lo que fue un día precioso, de los más bonitos que he vivido en mucho tiempo. No sólo porque conseguí ganar la prueba de 100 metros libres y por primera vez en mi vida ser Campeón de Álava de algo, mejorando en más de un segundo mi mejor marca, sino porque la pude compartir con muchos compañeros de equipo con los que me he metido en esta pequeña aventura que son las competiciones de natación y que estamos viviendo con una ilusión enorme.

Una prueba de 100 metros no da para demasiadas curvas, gráficas y análisis, pero ya sí tuve la suerte de que me pudieran grabar, de tener además marcador electrónico y este es el resultado. 31″99+33″00=1’04″99

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Desde mi primera competición en diciembre de 2015 donde hice 1’07”37 , el mes siguiente hice 1’07”40, para bajar hasta 1’06”05 en el campeonato de España de Gijón a finales de enero y ahora 1’04”99. Desde diciembre a ahora creo que sí estoy nadando más rápido, pero probablemente no como para más de 2 segundos el 100 (el Nero14 seguro que algo ayudó también aunque tengo que aprender a ponerlo en su sitio), pero estoy aprendiendo a regular los ritmos, que era uno de los objetivos que tenía cuando me metí en esto. En un 100 es más o menos fácil. Ya veremos el día 12 de marzo en Sopelana, donde volveré a enfrentarme al 400 m libres, y veremos si no reviento en el 200, que es lo que me ha pasado hasta ahora.
A todo esto, también nadé el 50 metros libres. En este caso “sólo” pude hacer tercero a pesar de empezar el segundo largo en cabeza, pero al final no pude aguantar. Aún así también conseguí mejorar en medio segundo mi marca y hacer 29″52. No me gusta mucho esta prueba, pero ya metidos en harina, había que intentarlo.

Campeonato de España de Natación Máster 2016.

Este fin de semana he participado en mi primer Campeonato de España de Natación Máster. Por un lado, suena un poco imponente. Mi tercera competición en piscina y un Campeonato de España… pero realmente tampoco lo es tanto, porque no hay mínimas para poder participar y puede ir cualquiera con tal de estar federado.

De todas formas, a mí me gusta tener cierto respeto por las competiciones y no me gusta estar en la cola de las clasificaciones, así que si no me veo capaz de competir con un resultado medianamente digno, no participo. Después de estudiar las clasificaciones de otros años y ver mis tiempos en mis primeras dos competiciones, creía que podía estar en la zona media. Una vez olvidados los puestos, queda el objetivo fundamental en estos casos que es mejorar tus marcas. Algo que me está creando una pequeña adicción, porque es algo que nunca había vivido en unas condiciones de competición tan constantes. Cambia la piscina, los rivales de serie, pero son muchísimo más contantes que cualquier Media Maratón, 10k, travesía o por su puesto, triatlón. Esto sí que es una lucha de ti mismo contra el tiempo. Tu calle, 25 metros de piscina y el reloj. Y me encanta.

Disponer de una oportunidad para mejorar esta marca, en un Campeonato de España, con una grada llena, un ambiente genial, marcador electrónico, poyetes Pro y rodeado de buenísimos nadadores en una piscina con solera como la del C.N. Santa Olaya, no es una ocasión que se presente todos los días. Poder hacerlo además representando al CN Judizmendi, participando incluso en un relevo del 4×50 mixto, también me ponía y mucho.

Así que me inscribí en todas la pruebas de libres que se celebraban el fin de semana: 800, 200, 100 y 4 x 50. Un poquito de todo. No podía hacer la que está siendo mi prueba, el 400, porque era el jueves, así que mis entrenamientos se centraron en el 800, dada mi presunta condición de fondista (más bien por eliminación ya que lo que está claro es que velocista no soy).

Me curré unas cuantas series rotas con Koldo en la piscina, primero de 50s y luego ya de 100s con la cinta de HR-swim de Garmin, que me «dijeron» que tenía que intentar ir a por un 1’21»-1’22″/100.

Me encontraba bastante mejor que para Donosti, tal vez algo mejor que en la semana previa a Logroño, pero por primera vez en un par de meses, no me molestaba el hombro derecho, gracias en gran parte a mi fisio Gonzalo de Eskuekin.

Con esto de no haber mínimas y que parece que lo de la natación también se ha puesto de moda, había nada menos que 362 participantes en el 800. Así que no quedaba más remedio que meter a dos por cada calle. Esto consiste en que primero sale uno desde el poyete, se va al lado derecho de la calle y se queda allí, y a los 10 segundos dan la segunda salida, y éste se va al lado izquierdo. En este caso, me tocó a mí salir segundo y quedarme en la izquierda. Casualidades de la vida, de los 362 me tocó con uno de los pocos triatletas que andábamos por allí (Juan Carlos Tomás) al que encima conocía desde el Triatlón de Logroño que gané y él hizo tercero. También coincidimos en la jornada de la Liga Norte Master en Logroño, donde le saqué unos segundillos en el 400, pero él llevó un ritmo mucho más constante que yo.

Así que después de estudiar esto, y de escuchar a todo el mundo que me decía que como me pasara en el primer 400 igual no salía del agua, me propuse cogerle como referencia, y aguantar hasta la segunda parte de la carrera en la que intentaría apretar.

Después de una cámara de llamadas interminable, por fin se dio la salida (creo que esta vez salí bastante mejor) y ya en el agua me relajé y empecé a disfrutar nadando. Tanto que a pesar de querer ir tranquilo, pasé el 100 en 1:13.8 y el 200 en 2:31.8 (casi al ritmo del 400 de Donosti) con lo que le recorté 5 segundos a Juan Carlos y ya casi estaba a pies (en mi lado). Así que decidí levantar un poco (por supuesto no sabía a cuánto iba) y aguantar ahí, pasando a 5:16 el (400), sólo 3 segundos por encima de mi mejor marca en 400. Me encontraba relativamente cómodo y me mantuve hasta el último 200 en el que empecé a apretar un poco más, o al menos esa sensación me dio, y conseguir tocar la pared prácticamente a la vez que Juan Carlos y el chico de la calle de al lado que también salió 10 segundos antes. No tenía ni idea del tiempo, pero al salir del agua vi un papel que ponía 11’09», pero no estaba seguro de que fuera mío. Me entró un disgusto bastante serio, pensando que había asegurado demasiado y la había cagado, pero enseguida mis compañeros de equipo me dieron todos los parciales y me dijeron que había hecho 10’51,50 con lo que había cumplido el objetivo, a pesar de estar muy muy lejos de nadar en negativo (5:16+5:35). Luego resultó que sí que me habían apuntado 11:09 (que no podría ser porque Juna Carlos hizo 11.00 y mis parciales no cuadraban) pero pudimos reclamar (Gracias Iñigo!!) y nos corrigieron el tiempo.

50

100

200

400

800

00:35,5

01:13,8

02:31,0

05:16,0

10:51,5

 

00:38,3

01:17,2

02:45,0

05:35,5

El puesto, como he dicho antes era lo de menos, pero por hacernos una idea de dónde ando 25/41, en 35-39 a 1:48 del primero (13s/100), un 17%. Casi nada.

Con el objetivo principal cumplido, a la tarde volví para nadar el 200. Nunca había hecho uno, pero creía que podía andar por 2:24. Nadé muy a gusto, intentando ir en progresivo, aunque me dio tiempo a perder la cuanta de los largos 2 veces en 200 y tuve que mirar al marcador en el viraje del 100 para ver cuántos iba.. y así además pude ver que el primer paso lo hice en 1:08. En el último 50 todavía tuve tiempo para apretar, y hacer el gesto de mirar al marcador al tocar la pared J y ver un 2’22,9 y a Iñigo felicitándome… No podía estar más contento.

50

100

150

200

00:32,2

01:08,8

01:46,0

02:22,9

 

00:36,6

00:37,2

00:36,9

Por hacer otra vez la misma cuenta que en el 80, hice 22/50 en 35-39, A 29SEG!! del primero (un 20%).

Y ya para el domingo, me quedaba divertirme en el 100 y sobre todo, quería bajar mi 1:07:37 de Logroño. También intenté salir suave en el 25 para ir progresando poco a poco. A pesar de quedarme un poco «colgado» en el primer viraje, también me salió bastante bien y conseguí hacer 1’06,05. El 35/53 en 35-39, a 16!seg del 50.74 que fue record de España (un 23%).

Y para terminar, la última posta del 4×50 Mixto +200 del CN Judizmendi, donde teníamos alguna remota posibilidad de conseguir medalla, y el objetivo era no ser yo el que fallara… La presión de competir en un equipo con gente que se lleva medallas…

Hice 29.78, que también es mi mejor marca en 50 m, aunque nos quedamos a 6 segundos del bronce, por lo menos fue la única carrera en la que aporté puntos al club.

En resumen, muy pero que muy contento con la experiencia, con el viaje, con la gente del equipo y con cómo estoy nadando. Creo que sigue habiendo margen, y espero que esto dure por lo menos hasta mayo, cuando me eche al Lago de Saint-Pee con el neopreno por primera vez esta temporada en una competición de triatlón.