Asics Metaspeed (vs Nike Next%)

Cuando empezó la pandemia, estábamos en plena fiebre de la fibra de carbono en las zapatillas, debates de legalidad de Nike etc. Uno esperaría que un año y medio después, el resto de marcas ya tendrían que tener sus zapatillas de fibra de carbono. Bueno, en realidad las tienen, pero por lo que parece, no se han acercado al nivel de las Nike. Sólo Adidas parecía haber conseguido algo parecido en cuanto rendimiento, pero no han terminado de imponerse entre los atletas y triatletas.

Pero hace unos meses, Asics lanzó su segunda versión de fibra de carbono tras la no muy exitosa Metarace que llevó Frodeno antes de fichar por Hoka: las Asics Metaspeed.


No es que hayan hecho una campaña publicitaria bestial, sino que, poco a poco hemos ido viendo a algunos triatletas no esponsorizados llevar esas llamativas zapatillas naranjas.

El primer caso que más llamó la atención, fue el de Beth Potter (sí esponsorizada por Asics) logrando un récord mundial de 5k en ruta bastante dudoso (que creo que no ha llegado a homologarse) que puso las zapatillas en el candelero con noticias en diversos medios de comunicacón.

A partir de ahí, fue bastante interesante ver a Sophie Coldwell haciendo con una interesante revisión en Instagram, para luego verla dos WTS después, correr en Leeds con ellas. También el curioso caso de Lucy Charles, la triatleta más mediática y que no tiene sponsor de zapatillas (¿?), que también las fue probando poco a poco hasta también llevarlas en su brillante incursión en ITU en Leeds (con varios primeros planos de las zapatillas en su intereseante vídeo de preparación de la carrera en Youtube). En chicos, otro ejemplo ha sido del de Kristian Blummenfelt, que también ha sustituido sus Nike por Asics para, primero, terminar ganando con ellas en Yokohama…. y ahora proclamarse ¡campeón olímpico!


Por terminar de incidir en el cambio de tendencia, en la carrera de chicos de Tokyo, me pareció contar 9 Metaspeed entre los 15 primeros triatletas durante la primera vuelta de la carrera a pie. Y para colmo, Duffy, esponsorizada desde hace mucho por Asics, también gana de calle el oro olímpico…

Además de todo esto, a mí me llamaron la atención por parecer unas zapatillas más normales que las Alphafly, algo más baratas pero todavía bastante caras (250€). Posteriormente conseguí encontrar alguna crítica independiente anglosajona bastante buenas. Me echaba para atrás el que no se pudiera quitar la la plantilla (llevo 20 años con plantillas tanto para entrenar como para el día a día) y un drop de sólo 4 mm, cuando cada vez que bajo de 8-10 tengo problemas en los tendones de Aquiles.

Intenté encontrarlas en tiendas físicas pero no hubo manera. Me dijeron que no estarían hasta finales de julio.. Así que lo intenté por internet, pero tampoco era sencillo, ni si quiera estaban en la web de Asics.
Hasta que aparecieron en Bikila y, arriesgando un poco, me compré un US10,5 en lugar de US11 que llevo en Nike, Adidas y en Brooks. Me gusta sentir las zapatillas más justas de lo que llevo éstas… Cagada. Las tuve que devolver y me cogí el US11.

Sensaciones

En este blog se habla de números y no de sensaciones, pero siendo este tipo de zapatillas con fibra de carbono tan diferentes a lo estándar, creo que es un tema importante.

El ajuste es muy bueno, el upper parecido al de las Next, pero tal vez algo más consistente y la lengüeta bastante normal pero muy fina. La suela blandita, pero no tanto como las Next, y lo que más me llamó la atención, era el exagerado efecto balancín de la puntera, que se nota hasta andando.

El tamaño y forma de la suela es muy similar al de las ZoomFly Flyknit, y por lo tanto, mucho más ancha y estable que las Vaporfly 4%, por ejemplo. El agarre también es mejor que el de Nike.

No he corrido mucho con ellas, pero el típico desgaste de la primera capa del ZoomX no aparece.

Lo peor a primera vista, los cordones, parecían del mercadillo de los jueves, aunque la idea, era sustituirlos rápidamente por gomas.

Números

Pero como lo que diferencia a este blog del resto de cosas que leáis o veáis por ahí son lo números, aquí están. Para probarlas, hice algo parecido a lo que ya publiqué con distintos modelos de zapatillas en 2019. Primero, pesarlas:

Peso: 217 gramos con la plantilla en US11. Una pasada. Por contextualizar, es 10 g menos que unas Adios de las de siempre, 25g menos que unas Boston o 41g menos que las Flyktnit (todos pesos SIN plantillas). Para terminar, las vaporfly4% y las Next pesan 202 y 204 gramos SIN plantillas.

Comparaciones de rendimiento

Metaspeed vs Hyperion Tempo

En primer lugar, hice una primera toma de contacto contra las Brooks Hyperion Tempo. Probablemente, las mejores zapatillas que he tenido para entrenar. Ligeras (218g sin plantillas, 233g con plantillas), con amortiguación más que suficiente, estables, buena tracción, con muy buen agarre, buena durabilidad de la suela… pero no tienen placa de carbono.

Tras un entrenamiento en bici de 1h40 con 5×5′ a 320w, hice un 6x1k, en lo que suponía mi primera transición de año (tampoco es algo que suela hacer demasiado)

El resultado me pareció, increíble. Literalmente. No me lo creía. Más que nada porque en las pruebas que le había hecho contra las ZoomFly Flyknit sólo había entre 1 y 1,5 seg/km.

Quitando las dos primeras tandas, que nunca cuentan, el resultado de los promedios es:

  • 2 zancadas/minuto más rápidas y
  • 3,5 cm/zancada más

que con las Hyperion, que se traducen en ¡6 seg/km! Una barbaridad-¿Efecto placebo? Probablemente. O que fui soltando las piernas según iba pasando el entrenamiento y viniéndome arriba progresivamente, pero el pulso, aunque subió algo, tampoco lo hizo en exceso. Desde luego, 2ppm no dan 2″/km…

Metaspeed vs Next% 

Entonces apareció Álvaro Palacios y me dejó sus Next%. La competidora ideal, el mismo precio, conceptos de zapatilla diferentes, pero probablemente las que mejor funcionan hasta ahora a la mayor parte de la gente que las tiene por no requerir una adaptación como parece que hace falta en las Alphafly. (Insisto, no he probado las Alphafly)

Las metí al coche y esperé a que se diera la oportunidad, que surgió cuando menos lo esperaba. Tan poco, que no llevaba el pulsómetro de cinta y como no me fio del sensor óptico, casi ni los he mirado… Así que había que fiarse de mi capacidad para llevar un ritmo constante (que ya es la segunda vez que digo que lo hago bien… ;))

Resultados.

«Pequeña» diferencia a favor de las Asics. Sin embargo, la sensación era mejor de lo que indican los tiempos. Sobre todo en los primeros metros, me daba la impresión de que las zapatillas salían disparadas hacia adelante, obligándome a echar los hombros hacia adelante. Como si estuviera corriendo cuesta abajo. También son más estables y al final de la serie me parecía tener menos sensación de hundirme, de ir pisando huevos, que es lo que me ocurre en las Next.

-si hago la media entre la ida (más rápida en todos los casos porque tenía viento a favor) y la vuelta de cada tanda, exceptuando la primera, me salen casi dos segundos más rápidas las Asics. También se ve que la «ida», a ritmo más alto, es más rápida en las Asics. No hay una diferencia clara en la longitud de la zancada, pero sí parece que el efecto balancín acelera la cadencia.

Pero como no me gusta que las pruebas queden cojas (y hacerlo sin pulso lo era) y el ritmo al que hice las series (3’10-3’15/km) era poco real para mí en competición, le di una vuelta más, haciendo varias series de 2’2k con cambios de pendiente, giros, etc, a ritmo de 10k (3’25/km).

Aquí es donde se confirma lo que había visto hasta ahora. Si comparo las tandas 3 y 4, en las que acabo con el mismo pulso, siendo la última la Metaspeed, 1.7″/km más rápido con Asics, consecuencia, de nuevo, de un pequeño aumento en la cadencia y otro ligero aumento de la longitud de la zancada.

Si a esto le sumamos, que creo que es más fácil de poner en las transiciones, parece que tiene mayor durabilidad y que me siento más cómodo con ellas por notarlas más naturales, para mí no hay debate, y en mi primer triatlón de la temporada, corrí con ellas, con buen resultado.

Respecto a las posibles pegas mencionadas al principio, sí he notado los tendones de Aquiles algo tiesos al día siguiente, pero nada relevante y  bastante lejos de una tendinitis.  No las usaré como zapatillas de entrenamiento y creo que quedan reservadas para carreras de hasta 10km, por lo que no creo (espero) que vaya a tener problemas en este sentido.

Triatlón de Pont de Suert 2021. 20º (3er v1)

Dos años  después de mi último triatlón (Tarazona Open), un poco más de mi última salida en masa no Open (Getxo) y otro poco más del último triatlón con salida en masa y rodar en grupo grande (Lekeitio) volvía a competir en un triatlón como los de antes.

Me ha costado volver a competir por varios motivos, que supongo que mucha gente comparte. La situación es, evidentemente, rara. A pesar de la pandemia, he podido entrenar bien, exceptuando algunas restricciones de horarios con las piscinas en Vitoria. A entrenar bien, le llamo llegar a 8-10 horas/semana con cierta continuidad (consistencia).

 

Pero no terminaba de estar animado para competir. Primero, la caída pre Zuia. Después, algunas consecuencias que no vi al principio (lesión en el hombro izquierdo) y para terminar, que no terminaba de ver lo de la seguridad en las carreras. No me parece que las carreras en sí mismas sean entornos peligrosos, pero sí todo lo que las rodea. Tampoco es que sienta miedo, pero no termino de verlo del todo.

Así que entre cancelaciones en la mayoría de carreras de Euskadi, dudas de celebración de otras, que llevo dos años entrenando sólo y no me entero ni de qué carreras hay por ahí, dificultades familiares y mucha pereza para salir fuera a competir, iba pasando el tiempo y veía que iba a pasar el verano con otra temporada en blanco. 

Rober Albir me habló del triatlón de Pont de Suert y me pareció una buena opción: distancia olímpica, al lado del valle de Aran, en la semana que siempre suelo ir a Pirineos con Susana. Todo encajaba, así que me apunté sin pensarlo demasiado. 

Estado de forma

Nadando sabía que estaba bastante peor que otros años. Ya en invierno hice 7″ peor el 100 del 400m libres del Cpto de España Máster (2″/100) que mi MMP. Para terminar de liarla, tras 3 semanas sin tocar el agua por la herida de la cadera consecuencia de la caída de Ondategi, cuando por fin me metí, me di cuenta de lo que me dolía el hombro izquierdo. No me quedó más remedio que recibir un par de sesiones de EPI en Eskuekin, que lo solucionaron a tiempo para carrera, pero no para entrenar en condiciones y ya ni me acuerdo de cuándo fue la última vez que cogí unas palas. Aún así, las últimas pruebas que estaba haciendo de neoprenos ORCA más o menos me daban la misma diferencia que respecto a otros años: 2-3″/100, aunque con mucho menos fondo, ya que raro ha sido el día que haya pasado de 2500m. 

En la bici, me gusta mucho las preparaciones específicas de las carreras: estudiar el perfil y hacer simulaciones en los entrenamientos. La bici era sin cabra. 20 km de subida muy tendida con 2 km finales al 4% y vuelta, pero no terminaba de tener muy claro si la bici era con o sin drafting. Por si acaso, preparé las dos opciones así que dejé la cabra y las pruebas de los apoyacodos y empecé a hacer series. Con un circuito así, lo normal es que se llegue en grupo a ese repecho y ahí haya algún ataque que produzca un corte. Estos son algunos de los entrenamientos que hice:

-Aldayeta: 5×5′ A 320w.

– Zaldiaran: 6×1′ 400w /1’rec + 5×3′ 300w /1’rec

Series llano road. 3×10’/2’r 270, 280,290 + 4×3′ 1’r 300,315,330,330

Creo que un par de semanas antes de la carrera, encontré el protocolo COVID de la carrera y decía que había salida en rolling star y que guardar distancias entre corredores en los 3 sectores. De donde deduje que sería sin drafting… Hasta que el jueves vi el briefing on-line y vi que era salida en masa (conté 430 inscritos en distancia olímpica!!) y carrera con dráfting. Bueno, pues nada. También estaba preparado para eso. 

Corriendo, bien. Como siempre: poco volumen pero con buena intensidad. Tenía confianza tras las últimas series en las pruebas de las Metaspeed contra las Next2. Un poco de respeto al final del 10k, pero sabiendo que tenía buen ritmo.

 

Previa

Y con este panorama llegamos a Pont de Suert. El sábado hicimos la parte final del recorrido en bici. Un tramo bastante chulo, con asfalto rugoso y algún agujero, pero que me iba bastante bien, sin ninguna pendiente grande ni curvas técnicas.

Al mediodía fuimos a ver el pantano y la T1 bajo un calor achicharrante. Nos costó bastante encontrar la salida. Boxes con salida muy complicada del agua, cuestas tipo Aritzaleku, pero con muchas piedras grandes tapadas con alfombra.  Una vez visto todo y bastante tranquilo ya, volvimos a Vielha a descansar

El domingo salimos de Vielha lloviendo, pero tras pasar el túnel se abre bastante y el suelo está seco. Aparcamos fácil y dejo las Metaspeed con los calcetines (ya he visto que no voy a pasar de 5 km sin ampolla en el dedo), un gel por si acaso, y el Garmin metido en una zapatilla en la T2. Cojo la bici y me voy a la T1.

En boxes, las bicis están super-pegadas. Ni el Onditz en sus mejores tiempos. ¿1,5 m? En fin. Bueno, llevamos mascarilla pero se me rompe  nada más llegar. Vale. Saco el neopreno de la bolsa y …oh! sorpresa! En lugar del prototipo de 2022 del 3.8 que he estado probando el último mes, aparece el Perform, el neopreno de Orca de aguas abiertas homologado por la FINA. Bien, Diego, bien. Es un neopreno bueno, muy cómodo, pero nado 3″/100 más lento con él, porque para que sea aprobado por la FINA tiene menos espesor de neopreno en tronco y piernas, por lo que tiene mucha menos flotabilidad en las piernas.

Toca trabajo mental. Convencerme de que por lo menos voy a llegar bien de hombros, de que toca darle a los pies y que siempre hay tiempo de arreglarlo en la bici si estoy listo. 

Me tomo el chupito de cafeína/taurina y demás estimulantes, de 226ERS, me acabo el bidón de isotónico de 500cc y me bajo al agua a calentar e ir cogiendo sitio. El agua está muy buena, el sitio está bien y me encuentro relativamente bien. Salgo a sentarme a una piedra y a esperar la salida.

CARRERA

Se hace una línea anchísima, estoy comodísimo en el centro, primera línea y se da la salida. No recibo ni medio golpe. Tengo las dos puntas de flecha a cada lado, no termino de decidirme, pero al final voy a la derecha que es la que veo mejor. Me coloco a pies sin muchos problemas y pasamos la primera boya, que serán unos 250, 300 m. Tras hacer el giro, limpio, sin problemas, busco de nuevo unos pies con la intención de ir cogiendo un ritmo cómodo y que vayan pasando los metros. Entonces, noto un golpe en el brazo derecho. Luego un enganchón en el brazo, y otro golpe… y así durante varios minutos.

Pasamos la segunda boya y otra vez se repite la misma historia,  hasta que al final, pierdo los nervios y me pongo a gritarle al individuo que me están dando. Obviamente, o no se entera o le da lo mismo, pero el caso es que a mí se me ha acelerado mucho el pulso, he perdido la respiración y he empezado a tragar agua… Empiezo a ahogarme y necesito tomar aire, por lo que doy unas cuantas brazadas de braza aunque eso supone que pierdo los pies y recibo algún golpe más de gente que me adelanta. Llegamos a la boya de giro para iniciar la segunda vuelta e intento hacer pie para coger aire, relajarme y pensar qué hacer. Pero no llego al fondo… Así que de nuevo braza, unos segundos más y empiezo a nadar intentando pensar sólo en respirar y no seguir tragando agua. El ritmo me da ya igual. He dejado de pensar en la carrera y sólo pienso en salir del agua cuanto antes. 

La segunda vuelta se me hace más corta y salgo con mejor sensación del agua, aunque me cuesta salir (sin los voluntarios que te sacaban de allí todavía seguiría dentro).  Corro hacia boxes por pura inercia entre eructos bastante desagradables. Veo a Susana y le digo que voy muy mal (supongo que ella ya se ha dado cuenta).

Encuentro mi bici pronto. Se me engancha el neopreno en el chip pero nada grave y empiezo a meter las cosas en la bolsa de basura… incorrecta. El chico del 217 me grita, ¡¡que es la meva!! (supongo que se escribe así)  Aúpa Diego. Le pido perdón, saco las cosas, las meto en la mía, casco y fuera.

Salto sin problemas y apretar.

Ya se me ha olvidado todo lo ocurrido en el agua, puedo respirar y sólo pienso en tirar hacia adelante. Cojo a un chico y sigo tirando… Hasta que veo que no llevamos a nadie a tiro y empiezo a mirar hacia atrás. Tampoco veo a nadie. Pienso que igual tampoco he nadado tan mal a pesar de todo. Al llegar al pueblo vuelvo a mirar y entonces ya veo un grupo de 8-10 que se acerca. Toca esperar y estar atento para engancharlo.  Lo hacemos sin problemas.

El cruce hacia el valle de Boi llega en un par de kilómetros y para entonces ya he visto que sólo tiran 3 ó 4 (Clotet, Cubells y Asensio; a los que no conozco de nada) Van con bastante fuerza pero el resto no tiene ninguna intención de tirar. Mi idea en estos casos es siempre la misma: tirar para intentar coger al grupo de delante. En este caso hay un matiz. Hay un punto crítico al que tengo que llegar con fuerza suficiente para aguantar un posible ataque. Así que una vez se inicia la subida y con el pulso más o menos en su sitio, empiezo a colaborar. No conozco a nadie, pero empiezo a estudiarlos. Clotet, el que más tira, me dice que hay que coger al siguiente grupo. No sé cómo sabe quiénes son ni a cuánto están, pero le veo muy convencido y ayudo lo que puedo. Cubells que anima a la gente a pasar sin mucho éxito, y Asensio el más consistente. Vamos rápido, a 280w medios. Por fin cogemos al grupo de delante, en el que distingo a Teje a rueda. Conociéndole un poco, si va ahí es porque ha visto que nadie tira y creo que van a llegar más frescos que nosotros al repecho. Diego, cuidado. 

 

Strava: Tramo hasta Barruera;

Total, que estamos unos 25 cuando empieza el repecho, ya nos hemos cruzado con los líderes, algunos triatletas sueltos y el siguiente grupo, que no nos lleva demasiado. No me he puesto a contar, pero no creo que llevemos más de 30 por delante y el grupo no está a más de 2 minutos. Intento colocarme bien, pero estoy un poco encerrado tras el último relevo. Hasta aquí, 32 minutos con 265 w medios/280 np/ 161 ppm.

Se produce el ataque previsto (que como siempre es de la gente que no ha tirado), sale Teje y poco a poco va saliendo todo el mundo que puede. Hasta que se produce el corte, en el cual soy el último del grupo delantero: el último kilómetro al 6,6% : 3’30» a 350w. 

Subida Erill

Casi la lío, pero para este momento es para el que he estado entrenando. Sólo pierdo 2 ó 3 metros que solvento bajando a casi 80 km/h sin dar pedales en la zona que el sábado me pareció que peor asfalto tenía. Cómo cambian las cosas en carrera…

A partir de ahí, decido que hay que pensar en la carrera a pie. No hay demasiada voluntad de seguir tirando, hay hasta 3 integrantes de un mismo equipo, yo he estado a punto de liarla una vez y no quiero hacerlo de nuevo. Me dedico a beber el bidón de Energy, a recuperar y sólo paso a tirar en la zona de la presa para evitar los agujeros más grande que vi el sábado y me quedo a cola con José Luis Cano. En el cruce con la Nacional también se produce un pequeño arreón que cierro bien. Ahora, concentración para la T2. No conozco la entrada, así que me quedo a cola, pero sin perder contacto. Me descalzo con margen, bajo sin problemas, noto bien las piernas y a por las zapatillas. 

Me cuesta ponerme los calcetines, más de lo previsto. Dejo el gel en el suelo porque me he bebido casi un bidón de 800cc en la bici, cojo el Garmin y a correr. No consigo ponerme el Garmin corriendo así que paro lo engancho y ahora sí: 10k.

Con esta transición tengo a todo mi grupo por delante y enseguida empiezo a adelantar. Noto que he dejado las gomas de las zapatillas demasiado sueltas y me baila un poco el pie, pero de momento no paro a apretarlas más. Voy con buena cadencia, bien de zancada y empiezo a acercarme a Teje, que es la única referencia clara que tengo. Primer km a 3’35. Bien. En los olímpicos siempre tengo el objetivo de bajar de 35 minutos pero el circuito es complicadillo, tampoco es que esté a tope y estoy progresando bien, así que me marco como objetivo aguantar ahí.

Y así van pasando los kilómetros. No pierdo ritmo, pero no tengo ninguna referencia y es complicado mantener la concentración. Sigo pasando gente del grupo de bici, llego a Altuna que iba muy por delante, a las primeras chicas… No tengo ni idea del puesto, ni en la general ni en v1. En la segunda vuelta empiezo a notar un amago de flato, levanto un pelín el pie en los repechos y me olvido definitivamente del 3’30. El terreno no es fácil. Hay algún tramo rápido, pero también alguna zona de hierba en cuesta, algún repechín y varios giros de 180º

Veo a Cubells muy por delante, algunos del RayoTeam que tampoco les pillo y a Chirico (2º V2 al que tampoco conocía) pero que creo ya tampoco le pillo. Sólo me queda intentar adelantar a las dos primeras chicas y acercarme lo que puedo a Anna Godoy que ha salido con los chicos. 

META. Me esprinta en la recta final un tío que iba en relevos (algo que me jode bastante, la verdad, porque le llevaba «a rueda» toda la última vuelta y no me había enterado) y entro sin tener ni idea de mi puesto ni especialmente contento.

Pero al llegar a la zona post-meta veo muy poca gente. Mucha menos de la que me esperaba y a nadie en el stand del Compex y me tumbo para probar las botas de compresión 🙂 (por cierto, al día siguiente tenía las piernas mejor que nunca tras un olímpico) .

Hablando con Teje y los Altuna, parece que puedo estar entre los 20 primeros y ser podio en v1… Así que nos quedamos un rato más a pesar del calor. Pero la espera merece la pena. Subo al lado de Richard Calle (que no sabía ni que corría) y es algo que me hace bastante ilusión, porque ya no es el que fue, pero mira, ahí estoy al lado de un Campeón de España de LD. 

 

Clasificación y Conclusión.

No sé por qué cuesta tanto publicar la clasificación en pdf de toda la vida, una vez que ya tienes todos los datos, pero bueno, la he pasado a Excel y sacado los puestos por parciales. (Para ver el top 50  pinchar aquí).

37º nadando a 6’30» de Godoy(20″/100) ( parece que eran alrededor de 1750), a 2’30» de Altuna (9″/100) y 30″ de Tejería. Auténtica MIERDA de natación, condicionada por el subnormal que me estuvo dando golpes sin parar. A pesar de eso, creo que el resultado final no hubiera cambiado mucho, ya que creo que habría estado en el siguiente grupo y nos hubieran cogido por detrás. Pero no me gusta haberlo pasado tan mal. 

Contento con la bici. Con dos partes muy diferenciadas, creo que no pasé muchos apuros y tuve bastante suerte con el grupo que me tocó.

También contento con la carrera a pie. No fue la carrera de mi vida, pero tampoco estaba preparado para ello. Las Asics Metaspeed fueron muy bien, y la semana posterior no he tenido problema en los tendones de Aquiles.

Más o menos en el mismo orden que siempre, que no es poco.

Total, 20º en un Campeonato de Catalunya, creo que está bastante bien. A un minuto del top10, lo hubiera firmado con los ojos cerrados al empezar, así que bastante contento aunque sé que tuve bastante suerte con el grupo de la bici.

¿Y ahora? Pues no sé. Pero quiero recuperar algo de mi nivel anterior en la natación antes de competir de nuevo, que todavía no seré cuando será y ya iremos viendo. De momento me quedo con esto: