Por fin llegó el fin de semana más esperado del año: mi primera participación en un Cpto de España. Sorprendentemente, durante la semana estuve bastante más tranquilo de lo habitual, y así seguí hasta el día de la carrera. El viaje, con Fuente y Beto, se me hizo bastante corto y sobre todo relajado. Dormí bastante bien dentro de lo que cabe, aunque por la mañana me sentía cansado, así que después de recoger los dorsales, decidimos saltarnos la reunión técnica y descansar un poco. Que en mi caso significa siesta de 20 minutos.
Antes, ya habíamos recorrido el circuito en coche. No era tan duro como nos habían dicho, y yo tenía la sensación después de correr en Madrid, de que cuanto más duro fuera, mejor nos iba a nosotros. Las bajadas a pesar de pronunciadas y algo estrechas tampoco eran nada del otro mundo ya que la carretera estab muy limpia (la organización había limpiado toda la gravilla el día anterior) y parecía que no iba a llover.
Nos presentamos en boxes de los primeros para no andar con agobios y conseguir calentar bien en el agua, no como en Madrid. Vaya que si lo conseguimos. Una hora antes de empezar la carrera, ya lo teníamos todo preparado y empecé a ponerme el neopreno,
Calentamos bien, tranquilos, y 15 minutos antes de la salida, todos en las bicis para la cámara de llamadas. Un numerito interesante… con todos desfilando ordenados por número de dorsal… con risillas y comentarios nerviosos entre los participantes. Bastante buen rollo.
Salida. En la primera brazada, me doy cuenta de que no le he dado al pulsómetro.. Genial Le doy bajo el agua, compruebo que funciona y reanudo el braceo. Beto, que salía al lado mío, va como un torpedo, así que la primera estrategia que era cogerle los pies, se esfuma.. Veo que salen dos puntas de flecha, y yo estoy justo en medio, y me acoplo a una de ellas. Golpetazo tremendo en las gafas, que parece que se me van a salir, pero milagrosamente se mantienen en su sitio. Es lo que tiene llevar las gafas de Phelps :). No veo las boyas, y de repente llega la primera. Estoy bastante abierto, y eso hace que me ahorre golpes a costa de perder algunos segundos. Retomo el rumbo siguiendo estelas porque sigo sin ver las boyas… Se vuleve a girar a la derecha, de nuevo muy abierto, y se enfila hacia la salida del agua, que ahora sí que la veo. Delante mío llevo a uno que mueve los pies una barbaridad y mueve más espuma que un fueraborda… así que aunque puede ser algo incómodo, me pongo detrás que siempre iré más descansado.. Voy bien de brazada y a ritmo de respiración cómodo, pero me da la sensación de que llevo demasiada gente delante, pero seguro que voy mejor que en Madrid…
Salgo del agua en 23.12, justo cuando sale el primero del grupo de edad anterior, por lo que los primeros cálculos van muy bien. Al llegar a la T1, Beto, como era previsible ya no está, cojo la bici, saltito de la rana, me acoplo y me pongo a tirar como un loco. No puedo dudar. Antes del llegar al km2 me parece ver un mono tecnun,,, Sí, es Alberto,, o he nadado muy bien o el mal, o las dos cosas a la vez.. El caso es que le engancho, palabritas de ánimo y aflojo un poco para que se acomode en el trenecito que llevo detrás. Su ayuda puede ser fundamental después. Además, llevo 10 minutos a 170 ppm en bici, y bastante gente atrás, asi que empiezo a pedir ayuda sin mucho éxito. Me acuerdo de cómo la gente critica después las pruebas con drafting en los foros… En fin.
En esto, llega la primera subida. 2,5 km al 5-6%, en los que la gente comienza bastante fuerte. Beto y yo nos ponemos a la par, a un ritmo bastante sostenido, al que sabemos que les acabaremos cogiendo como así ocurre. Bajadita, y de nuevo a subir. Otros 3,5 al 5%. Esta vez es Beto el que tira, y yo me pongo 3º, a 170 ppm. Cómodo pero tampoco sobrado. Justo antes de coronar, todo cristo acelera para coger posiciones para la bajada que se presume interesante. Al estar el suelo ya seco y el tráfico cerrado, invadimos ambos carriles sin miedo. Sólo hay un punto peligroso, que ya teníamos reconocido, una herradura que llega tras una pendiente importante en la que Alberto se marca un recto interesante porque alguno le despista en la trazada.
A partir de aquí, un rompepiernas en los que 10-15 que vamos no conseguimos ponernos de acuerdo para relevarnos. Vamos a tirones, y al final después de tanto esfuerzo, llega un pelotón de 30 tíos que nos coge justo antes de empezar la última bajada. Me desanimo bastante, porque ha podido suponer muchos puestos… Además, en esta bajada me quedo cortado y me meto un calentón tremendo en los últimos 3 kilómetros yo sólo para intentar empalmar, sin conseguirlo.
Hago una buena T2 y empiezo a correr, esta vez con calcetines. Cojo un buen ritmo en la primera vuelta, pero no me acabo de encontrar fino. Tengo bastante calor y no voy nada fluido. Cada vuelta la doy un pelín más despacio, y tampoco consigo subir las pulsaciones de 172… Además, pierdo la cuenta de las vueltas que llevo, (no nos dan pulseritas) y voy más pendiente de hacer cuentas de saber si tengo que entrar o no, a meta que de la técnica de carrera. No tengo ni idea de en qué puesto voy, porque ya nos hemos juntado los de todos los grupos, doblados… De vez en cuendo, me acuerdo de bracear bien, pero apenas levanto las rodillas y la zancada es más bien corta. Al final, marco unos mediocres 38.52 en el peor 10000 de la temporada, y completamente roto, con la sensación de haber dado todo lo que tenía.
Ahora: pulpo empanada y unos cubatillas por Ferrol para celebrarlo…
Triatleta a ratos 