Al Triatlón Bajo Gallego (TBG) le tenía echado el ojo desde el año pasado. Algo lejos de casa, pero no tanto de Valtierra, con natación en pantano y bici completamente llana (incluso un pequeño desnivel negativo del 0.5%) y distancia olímpica sin drafting. Completamente a mi medida. Así que lo metí en el calendario de este año… hasta que lo cambiaron de fecha, de de junio a la primera de septiembre. Tras este cambio, en principio lo descarté porque uno de los objetivos del año era volver a correr el Cpto de España de Altafulla en distancia olímpica. Pero eso era cuando creía que estaba nadando bien. Una vez visto cómo he nadado este año en las competiciones y sobre todo, la oportunidad que me surgió de ir a Eurobike en la misma semana de Altafulla, me quedaban tres opciones:
1- Correr en Altafulla un domingo después de llegar a casa el viernes de madrugada después de una semana de feria.
2- Guardar la bala para un olímpico sin drafting la semana siguiente.
3- No ir a Eurobike y correr en Altafulla.
Y lógicamente, me quedé con la opción 2.
Así que le llamé a mi primo Iñaki para ver cómo era la logística de la carrera con las dos transiciones. Me dijo que no me preocupara, que ya conseguiríamos coche o conductor para movernos entre ellas y me centré en entrenar.
Como ya dije en el post de análisis de natación de este año, en lugar hacer cosas diferentes en la piscina, sacrifiqué el entrenamiento de bicicleta del sábado por la mañana para ir con los Wollongong Wizards a sus entrenamientos de aguas abiertas en Landa. Aprendí que mis principales puntos débiles eran el paso de las boyas y empezar demasiado fuerte. No sé si los he solucionado completamente, pero al menos conocerlos es el primer paso.
En bici me harté de hacer series de 10 – 20 minutos a 290 y 275 w respectivamente, buscando hacer 265-270w en carrera, y corriendo, pues poca cosa, como siempre. Algo en los alrededores de Friedrichshafen y un 4×920 “bueno” en la única “recta” en pista sin demasiado desnivel que hay en el Parque Tecnológico de Álava.
Así que descansando bien la semana anterior, y yendo a ver con Adrián la salida de la vuelta el sábado en lugar de ir a entrenar, me marché por la tarde solito y con un poco de pena por dejar en casa a la familia a Valtierra, donde hice noche.
El domingo, madrugón (5:20), pero de los que no te cuestan y a Zuera con Iñaki, Angel y Txema, nuestro chófer ayudante y un auténtico crack.
Compruebo que la previsión meteorógica se cumple y no hay viento y dejo la rueda delantera de 60 en casa. Llegamos a Zuera bien y sin que se nos caigan las bicis con tapas y lenticulares de la baca.
Hacemos el repaso de los favoritos en el coche: yo cuento con Jesús García Colás, con quien hace un montón de años que no compito pero sé cómo anda. Fernando Zorrilla con quien coincidí en Aritzaleku, no le cogimos en bici yendo cuatro detrás de él aunque sí le recortamos y luego me metió más de 2 minutos corriendo. Además, he visto en alguna otra clasificación a un tal Sicilia que corre un huevo y luego están David Huertas, Recansens Jr y algún otro chaval que nadan mucho más que yo, pero les debería coger en bici. Y claro, Iñaki, que lideró el ironman de Vitoria hasta el km140 por delante de Santamaría, Paredes, etc, hasta que tuvo que levantar el pie por problemas lumbares y que da igual los problemas físicos que tenga, que va a forzar hasta que no pueda más. Además, Iñaki también me habla de un tal Juan Mina, que hizo 8º en Vitoria.
Cogemos dorsales, dejamos las zapatillas (y calcetines y gel, que nunca me acabo tomando), foto para el blog y para acordarme en el embalse de dónde las he dejado y subimos a la Sotonera, aprovechando para ver la primera parte del circuito, con asfalto bastante irregular. Me fijo en el viento. Parece que será favorable al principio y de costado en la segunda parte.
Llegamos al pantano. Un sitio bien bonito, muy tranquilo, en medio de la nada y frío de pelotas y yo con pantalones cortos.
Vamos montando las cosas. Esta vez llevo latex también en la rueda trasera, así que hay que hinchar bien porque me han perdido algo desde el día anterior. 8 bares en las dos, lleno el bidón aro de polvos de Energy de 226ers, coloco el gel que luego nunca me tomo en el tubo horizontal, ajusto bien el visor en el casco y a boxes.
Vamos a calentar. El agua está bastante buena, pero a pesar de que tiene un color muy bonito, está muy turbia y no se ve nada. Salimos para la cámara de llamadas. Tengo el dorsal 52 así que tengo que estar un poco espabilado para coger buen sitio en la línea de salida, que está en el agua.
Me colocó detrás de Recansens e Iñaki. Los dos nadan bastante más que yo y casi seguro que no voy a poder seguirles a pies todo el rato, pero no conozco a nadie más y me tienen que llevar bien los primeros metros. A todo esto, me he dado cuenta de que no está Jesús. Bueno, uno menos…
Se da la salida. Como todas las que son desde el agua, las primeras brazadas y patadas son un poco caóticas, pero las solvento sin recibir golpes y voy bien a pies hasta la primera boya. Me concentro en pasarla rápido y vamos hacia la segunda. Voy relativamente bien en el grupo, pero empiezo a tocar demasiado los pies al de delante. Me pongo a la par pero no le puedo pasar, así que otra vez a pies, hasta que al final de la primera vuelta, parece que se harta un poco (con razón, pero lo siento, no te veo con el agua tan turbia) y se para para que yo pase. Veo que se ha producido un corto y me he quedado en el segundo grupo. Me pongo en cabeza del mío e intento coger a otro chico que va como a 20 metros pero no lo consigo en los 750 de la segunda vuelta.
Me pongo de pie. 23:14 para 1560 (medidos en Google Earth, porque al ser la salida desde el agua, el Garmin encuentra tarde el satélite) lo que da un 1:29/100, que no es para tirar cohetes, pero tampoco está mal después de hacer la segunda vuelta sólo.
Mirando la clasificación, Zorrilla me metió 2:30 en Aritzaleku y esta vez “sólo” 1:45.
En la cuesta (que no es la de Aritzaleku, pero poco le falta) me cantan el puesto 15 a 2 de la cabeza… Bueno, pues para optar a un podio son muchos puestos, pero 2 minutos tampoco parece insalvable. Así que me animo, hago la transición tranquilo pero sin pausa, con el visor en su sitio y un salto de la rana conservador, pierdo un puesto pero lo recupero en cuanto me acoplo en la bici. Ya sabes lo que toca, test de 1 hora en bici acoplado, pero sin olvidarse de que luego hay que correr un 10k.
Como he dicho, quería hacer entre 260 y 265w. En Laredo hice 253/276, en Castro 251/267. En este caso la potencia media iba a ser muy próxima a la normalziada, así que lo suyo sería estar más cerca del 260 si luego quería correr bien. Y había que hacerlo porque de nada servía llegar a T2 primero si luego me iban a pasar corriendo.
Así que pongo el modo de series, mi cadencia de 94-95 pedaladas y espero a que me baje el pulso mientras mantengo los 260w y empiezo a pasar gente. Como esperaba el viento es de culo, pero el asfalto está bastante mal y se hace difícil mantener la velocidad (42 km/h) de media, pero me concentro, agarro los acoples con fuerza, cojo un buen ritmo de respiración y empiezo a contar puestos hacia atrás. En el giro de 90º ya voy entre los 8 primeros, pero hay que seguir manteniendo, seguir en la posición y pensar que cuánto más viento haya, más partido voy a sacar a la aerodinámica: posición, ruedas, tapas, cuadro, casco y todo lo demás que tanto que me he trabajado.
Voy cambiando las pantallas del Joule de vez en cuando para mantener la concentración y ver que todo está en su sitio, y sigo pasando gente evitando con algún pequeño cambio que tengan la tentación de coger mi estela (un saludo, Guz). Hasta que ya entrando en Zuera paso a David Huertas y a Zorrilla. Queda poco a la T2, llevo a dos por delante y aun tío que corre más que yo detrás, así que vuelvo a apretar un poco para intentar distanciarle en lo posible. Al final, consigo mis 259/261 w y el tercer mejor parcial en bici, a 2:23 de Sergi Escobar y 1:13 de Iñaki.
Entro a la pista de atletismo y veo dos bicis. La Trek de Iñaki (a quien ya he visto corriendo) y una Shiv con tapas que no caigo de quién es.
Voy a mi sitio, dejo mi bici según va, colgada del sillín y mientras me estoy poniendo los calcetines, viene una juez a decirme que le de la vuelta… Me pongo de muy mala leche y le digo dos veces que no se sabe el Reglamento, pero la cambio y salgo corriendo.
Extracto del reglamento donde pone claramente que lo de la rueda mirando para mí, sólo es en la primera transición.
Al terminar la carrera fui a pedir disculpas/aclaraciones, más que nada por si lo tomaban en plan árbitro de fútbol y me echaban, y me dijeron que era algo específico de esta organización que habían explicado en la charla técnica la víspera (en la que lógicamente no estaba) y en boxes, donde sí estuve y nadie me dijo nada. Sin más.
Total, que entre una cosa y otra salgo de la transición detrás de Zorrilla en 4º puesto. Me digo a mí mismo que no pienso volver a quedar a un puesto del podio. Prefiero arriesgar aunque me salga mal ser 10º, pero ahí no me voy a quedar. Así que viendo que voy bien y confiando en que mis 37 años puedan con un sub23 en un olímpico sin drafting, cambio de ritmo e intento marcharme. Le saco unos 15-20 metros que intento vigilar en cada uno de los muchos giros de 180º que hay. Me veo bien de piernas, pero los 2 minutos de Aritzaleku pesan en mi cabeza. Por detrás no va a llegar nadie más, así que si mantengo ese ritmo (de aproximadamente 3:38 en un terreno muy irregular) creo que lo consigo. Llegada la segunda vuelta, me sigo notando más fluido que en ninguna de las carreras de este año (que gran error fue cambiar las las BrooksT7 por las Adios con gomas en Laredo y Vitoria).
Y cuando llega la tercera, veo que la distancia ya se ha hecho un poco más grande y me cruzo con Juan Mina (por fin he visto quién iba primero) y con Iñaki en puntos en los que antes no estaban. O sea, que voy recortando con los de delante. Quedan 3k. Ya sé que no reviento, así que vuelvo a cambiar la intensidad (no tanto el ritmo) para intentar recortar. En el último kilómetro ya les tengo a la vista, Iñaki empieza mirar atrás y sigo aumentando la intensidad hasta que llega la pista de atletismo (antes de lo que me esperaba) y esprinto a lo loco sin ninguna opción de coger a Iñaki , pero por lo menos intentando minimizar la distancia. 2º parcial a sólo 3 segundos del primero,
y lo que te verdad cuenta:
Al final, 3er puesto a sólo 20 segundos del primer puesto y 6 del segundo. Con un poco de rabia porque creo que igual podía haber cambiado antes de ritmo corriendo y si me hubiera preocupado de los de delante más que de los de detrás, igual podía haber hecho más, pero muy contento porque por fin me ha salido la carrera que tenía en las piernas. Llevaba una temporada bastante decente, pero en todas las carreras sabía que me había faltado algo, y los que me rodean sabían que me faltaba la carrera buena, y en la última oportunidad, pero al final salió.